Un día privado de gracia
Un día, privado de gracia y de Dios,
Peligros terribles me daban pavor;
Mas cuando un amigo me dijo de ti,
Jesús, mi justicia, la paz vino a mí. //
Cual lloran las hijas de ingrata Salén,
Tal yo mi pecado contrito lloré;
Mi culpa fue infame, quien muerte te dio;
Jesús, mi justicia, perdona mi error. //
Tu gracia divina mis ojos abrió,
Y vi quebrantada la ley de tu amor;
Bondad ni virtudes no puedo alegar,
Jesús, mi justicia, mi amparo serás. //
Jesús, nombre dulce, mi pena ahuyentó;
Mi miedo y tristeza, mi llanto y terror;
Sediento a la fuente de gracia corrí;
Jesús, mi justicia, ¡honor sea a ti! //
Jesús, mi esperanza y mi gozo serás,
Mi amparo y mi escudo, mi gran Capitán:
En ti venzo siempre, en ti venceré;
Jesús, mi justicia, sostenme en tu fe. //
Si en sombra de muerte mis pies han de andar
Tu nombre glorioso me habrá de amparar;
Y cuando a los cielos feliz volaré,
Tu gloria y justicia por siempre diré.
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