Mi Jesús, mi Salvador
Mi Jesús, mi Salvador,
Vivo está, Él es mi esperanza.
De la muerte no hay temor,
Mientras fundo mi confianza
En aquel que me salvó,
Cuando en cruz por mí murió.
Vida eterna Él alcanzó,
Yo también veré la vida;
Al lugar que preparó,
Su promesa me convida,
Él, que es la Cabeza, allá
A sus miembros llevará.
Yo soy suyo, bien lo sé,
Por su sangre redentora;
Doy la mano de la fe
A su mano salvadora.
Muerte, tú jamás, jamás
De Jesús me apartarás.
Carne soy, se juntará
Lo que es polvo con el suelo;
Mas el alma volará
Con Jesús al alto cielo,
Al reposo sin igual
De la gloria celestial.
No te asustes, corazón,
El infierno está vencido:
"Muerte, ¿qué es de tu aguijón?"
Con Jesús ya reunido,
Llanto ni dolor jamás
A su la sufrirás.
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