La voz de tu Dios
La voz de tu Dios, pecador, te despierte,
Escucha su voz porque es para tu bien;
Por ser fin del año el momento es solemne,
El año se acaba y tu vida también.
Te habló muchas veces con misericordia,
Darás cuenta de ello en el juicio después,
Entonces será un aguijón tu memoria,
El año se acaba y tu vida también.
Tú duermes al borde de un gran precipicio,
Con tanto descuido te vas a perder;
Cegado del diablo ni ves tu peligro,
El año se acaba y tu vida también.
Tú sabes que Cristo recibe con gozo
Al alma contrita que acude con fe;
No dejes pasar este tiempo oportuno,
El año se acaba y tu vida también.
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