A vanas efigies, a frías estatuas

A vanas efigies, a frías estatuas
Por dioses benignos las gentes aclaman:
No saben que el leño, el oro y la plata,
Ni aman, ni oyen, ni viven, ni andan.

Mas yo al que vive, y vida derrama,
Que mueve los mundos y todo lo abarca,
Al Dios que me hizo, al Dios que me ama;
A éste tan sólo adora mi alma.

En él, Dios viviente, está mi esperanza,
Creyendo su justa y santa palabra:
En él, que conoce mis múltiples faltas,
En él, que las borra y amante me salva.

Dejad, pobres ciegos, las cosas creadas:
Quien todas las hizo hoy vive, y os llama:
Venid a su Hijo, tened confianza;
Jesús solamente nos oye y nos salva.

Home





Next song