Tu sangre, ¡oh Cristo!

Tu sangre, ¡oh Cristo!, y tu justicia
Mi gloria y hermosura son;
Feliz me acerco al Padre eterno,
Vestido así de salvación.

Si fueren más los pecadores
Que arenas hay en playas mil,
Ya padeció Jesús por todos;
A todos llama a su redil.

Seguro estoy que el Hijo amado,
Que por mí aboga en gloria allá,
Pagó muriendo mi rescate;
La vida eterna diome ya.

Al responder al llamamiento
A estar feliz contigo allí,
Habrá de ser mi canto eterno:
"Moriste Tú, Jesús, por mí."

Home





Next song